Preparación. Seguridad. Despliegue.
El conocimiento especializado como pasajero en aeronaves militares es crucial para el éxito de las operaciones de movimiento aéreo (air movement operations), que incluyen tanto lanzamientos aéreos (airdrops) como aterrizajes aéreos (air landings). La movilidad aérea es vital para el éxito de ciertas misiones, permitiendo el despliegue rápido en respuesta a situaciones en diferentes entornos operacionales.
La importancia de la preparación del pasajero radica en su contribución a la seguridad y la ejecución rápida de misiones de alto riesgo, como los asaltos aéreos (air assaults), que son misiones de alto riesgo y alta recompensa (high-risk, high-payoff missions).
Funciones Clave:
Las responsabilidades del personal transportado se centran en la preparación individual y colectiva para la fase aérea de la misión, asegurando la seguridad y la coordinación logística:
Capacidades (Habilidades y Ventajas)
El personal capacitado en procedimientos de pasajeros aéreos otorga a la unidad una capacidad estratégica inherente para el despliegue rápido. Esta habilidad permite la inserción y la extracción de tropas utilizando aeronaves de ala rotatoria, como el UH-60L Blackhawk o el CH-47D Chinook, el último capaz de transportar entre 33 a 55 tropas. La ventaja principal es la capacidad de ejecutar operaciones de asalto aéreo que generan poder de combate y permiten la ejecución rápida de operaciones para explotar la iniciativa. El conocimiento de los procedimientos, como el uso de sistemas FRIES y SPIES para la inserción y extracción de tropas, facilita la maniobra táctica y la infiltración aérea.
Limitaciones
La participación como pasajero en operaciones aéreas conlleva riesgos elevados. Los líderes deben planificar operaciones aéreas de asalto en entornos donde el enemigo carece de superioridad aérea y sistemas de defensa antiaérea (ADA) efectivos. La operación está limitada por la necesidad de una coordinación exhaustiva con las unidades de aviación de apoyo. Además, la planificación debe tener en cuenta factores ambientales como el porcentaje de iluminación, el ángulo de iluminación, el techo de nubes y la visibilidad, lo que restringe el momento y las condiciones bajo las cuales puede llevarse a cabo la misión. El incumplimiento de los procedimientos, como el uso del casco o la dirección adecuada de las armas, aumenta el alto riesgo inherente a estas misiones.